Ahora que Astori se va, llega la hora de pasar raya y cuando se miran los números uno se queda atónito porque en la plena prosperidad que nos deparó el gran momento del mundo exterior que hemos vivido, con sus consiguientes recaudaciones impositivas, nos hemos seguido endeudando como nunca. Así como se oye.
Este gobierno empezó su gestión con una deuda de 13.300 millones de dólares. Hoy está en 17.300. O sea que nos hemos endeudado en 4.000 millones de dólares de más, un 30% más de lo que estábamos debiendo. Dicho de otro modo, hemos agregado unos l.300 millones por año, cuando en el gobierno anterior, el de la crisis, el que tuvo que pedir para salvar al país, el promedio de endeudamiento fue de 900 millones. ¿Alguien habría pensado esto, a la luz de los titulares permanentes de las páginas de los diarios y las declaraciones del publicitado Ministro?
Otra de las grandes creaciones “liberadoras” era emitir obligaciones del Estado en pesos. Nos liberábamos del ominoso dólar, el Estado confiaba en el peso uruguayo y emitía valores en su moneda. Resultado final: como el peso se ha revalorizado y el dólar a la inversa, hemos perdido una fortuna. Emitimos en pesos el equivalente a 2.500 millones de dólares y ahora debemos 5.600 millones.
Ni hablemos del engendro de pagarle al Fondo Monetario y al Banco Mundial, cuyas deudas estaban, la del Fondo a un interés del 4-5% y la del Banco a un 7-8%. Les pagamos y nos liberamos. Eso sí, emitimos bonos en pesos y pagamos alrededor de un 30%, si sumamos la inflación en pesos, la desvalorización del dólar y los intereses. O sea, un negocio horroroso, resultado de que compramos dólares para que no se caiga más, con ellos emitimos valores en pesos y terminamos con este resultado notable.
En 15 años, de 1985 a 1999, el Estado contrajo 8.520 millones de dólares de deuda. En 15 años, repetimos. Ahora, en sólo 15 meses, nos endeudamos 3.600 millones. Dicho de otro modo, en esta última etapa de Astori como Ministro-candidato contrajimos más deuda a un ritmo de 240 millones de dólares por mes, cuando el promedio histórico fue de 24 millones. O sea diez veces más.
Este es el legado histórico del gran Ministro. Esto es lo que nos deja, luego de anunciar maravillas financieras. En una palabra, por exceso de un gasto público que no se atrevió a recortar en su condición de candidato, hemos aumentado la deuda del país como nadie hubiera pensado.
En este mismo período, aprovechando la misma bonanza, Brasil pagó toda su deuda externa. Se quedó con su deuda pública interna pero no le debe nada a nadie en el mundo. No sólo le pagó al Fondo Monetario, le pagó a todos. Nosotros le pagamos al Fondo y, para hacerlo, contrajimos una deuda mayor, a un interés muy superior.
UNA GESTIÓN DECEPCIONANTE
Al irresponsable aumento de la deuda externa hay que agregar, al momento de hacer el balance de la gestión del Ministro Astori, algunos otros hechos que confirman un panorama absolutamente negativo. Veamos:
1) Un aumento incesante del gasto público. Cuando se inició la discusión de la Rendición de Cuentas, el Ministro dijo, usando un giro idiomático engañoso, que el “espacio fiscal” máximo era de 319 millones de dólares y que no se podía gastar un peso más. Es decir, que el aumento del gasto sería de esa cifra. Pero como todo el Gobierno está en carnaval electoral, esa cifra ya creció en U$S 40 millones más y hay legisladores que aseguran que al terminar la Rendición de Cuentas, el aumento global del gasto será de U$S 419 millones en vez de U$S 319.
2) Un régimen tributario que castiga a los trabajadores a través del Impuesto a la Renta Personal y castiga a todo el mundo con un IVA muy alto. Casi el 50% de los ingresos de las personas va para el Estado.
3) Una inflación creciente. Uruguay pasó 50 años para terminar con la inflación, lo que ocurrió con los últimos gobiernos colorados. Ahora vivimos con la amenaza permanente, la que especialmente castiga a los hogares más humildes.
4) Para colmo, el Ministro nos dejó un pésimo ejemplo ético al defender a capa y espada al Cr. Bengoa, lo que hizo hasta pocos días antes de ser procesado. Bengoa debió haber sido removido de su cargo de confianza apenas se presentó contra él una denuncia penal. Astori no sólo lo mantuvo durante el año que duró la investigación judicial, sino que además lo defendió, cometiendo un exceso descalificante.
Con lo que endeudaron al país, en LUGAR de una computadora por niño, deberían haberle instalado una oficina a cada uno en el World Trade Center !!!!!!!
Con lo que endeudaron al país, en LUGAR de una computadora por niño, deberían haberle instalado una oficina a cada uno en el World Trade Center !!!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario